El quimbolito es delicioso y apetecido, pero un desconocido para muchos 

Este delicioso plato, cocido al vapor y cuidadosamente envuelto en hojas, destaca por su suave textura y dulzura. El quimbolito es un postre que, como la mayoría de las recetas ecuatorianas, revela la riqueza cultural del país, como en Ambato –la capital de la provincia de Tungurahua–, donde es especialmente popular en las festividades y reuniones familiares. 

Muchos de los que viven en la Sierra del país crecieron viendo cómo los mayores preparaban cuidadosamente cada quimbolito en hojas de achira, mezclando ingredientes con una precisión que solo se obtiene con la práctica de los años. Hacer quimbolitos, como tantos otros platos de nuestra gastronomía, no ha sido solo una cuestión culinaria, sino una manera de fortalecer lazos familiares y mantener vivas las tradiciones. 

El quimbolito es una masa de maíz que se prepara cocida o asada y que se envuelve en hojas de achira para su cocción. Para lograr un buen quimbolito la harina de maíz debe ser de gran calidad y mezclarla con azúcar, huevos, manteca, pasas, vainilla, anís y licor, ingredientes que deben estar a temperatura ambiente para que se integren bien. 

Las hojas de achira se cortan en cuadrados y se blanquean en agua hirviendo para hacerlas más manejables. En el centro de cada hoja se coloca una porción de la masa y se envuelve con cuidado, asegurando con una piola. Se cuecen al vapor por unos 20 minutos o hasta que estén firmes al tacto. 

El quimbolito pesa entre 90 y 100 gramos y se puede comprar en panaderías, mercados, cafeterías y en algunos restaurantes, adonde la gente acude para disfrutarlo en la mañana o el final de la tarde con una taza de café, chocolate, leche o un agua aromática. 

Con raíces quichuas, aunque no se conocen sus orígenes

El quimbolito es la versión miniatura del “quimbol”, un pastel de harina de maíz, azúcar, manteca, huevos y especias que se envuelve en hojas de achira y se cuece al vapor. Así lo explica aquí El Universo y ofrece una receta muy fácil de seguir. 

Según Julio Pazos Barrera, escritor y docente ecuatoriano que ha plasmado su amor por la cocina en su obra literaria, dice que aunque la etimología de su nombre no se conoce, el quimbolito es el primo hermano de la humita, del chigüil, de la arepa de Patate y del tamal. Es primo segundo de ayampaco, del bollo de maduro, del maito y de la tonga.

Explica también que en el primer recetario que se publicó en el Ecuador, escrito por Juan Pablo Sanz, se señala que en el siglo XIX la masa de maicena y harina de castilla, envuelta en hoja de achira que se cocinaba al vapor, se conocía como “de quimbolito” y se preparaban tortas al horno con ella. Y esto sería lo más cercano a lo que podemos conocer sobre el origen del quimbolito. 

El quimbolito es un plato de Ecuador que también se da en el sur de Colombia. Goza de tanta aceptación en los hogares que existen premezclas industriales que se ofrecen en el mercado para prepararlo con mayor facilidad en casa. (I)